Cuando hablamos de empresa 2.0 o de empresa abierta tratamos de encontrar casos de organizaciones que cumplan con una serie de requisitos relacionados con el uso de la web social y de las herramientas cooperativas (2.0) o con la producción entre pares, la liberación del conocimiento y la red distribuida (abierta); y, claro, buscamos los casos entre empresas. Es lógico. La empresa es la forma de organización que ha triunfado hasta extinguir toda competencia.
Unos cuantos intuimos que esa forma de organización ha comenzado un larguísimo duradero declive. Pero su desaparición repentina como tal nos dejaría en un mundo arrasado conceptualmente. Al poco de vivir empezamos a relacionarnos con empresas para casi todo lo que necesitamos. Otros tipos de organizaciones beben de la sabiduría empresarial para llegar a sus altas cuotas de supuesta eficacia y eficiencia. La administración adopta, fracaso tras fracaso, la técnicas y métodos del manájemen empresarial.
Sin embargo, la empresa es sólo una de las posibles maneras de organizarse y responde a una asignación de responsabilidades delegada, reglada y normalizada. Las leyes sólo nos permiten, prácticamente, conseguir ese dinero nuestro de cada día convirtiéndonos en empresa. Como empresarios o como trabajadores debemos participar de esa figura organizativa para salir adelante. Es difícil imaginar una alternativa; pero toda lógica lleva a pensar que debe haberla. Las invenciones humanas siempre han tenido fecha de caducidad. La clave debe de residir en el adjetivo: 2.0 o abierta, más que en el sustantivo: empresa.
Una vez tras otra constatamos que lo 2.0 tras la palabra empresa fracasa solemnemente, que para encontrar casos de empresa abierta prácticamente los tenemos que fabricar. Así que ¿Por qué no preguntarse si la organización 2.0 o abierta sólo es posible libre de los rígidos y castrantes corsés de la regla empresarial?
Creo que ya somos bastantes los que pensamos que esto es así. Los que creemos que podemos llegar a organizarnos de manera abierta y colaborativa; pero que para poder disfrutar de ese juego hacker de trabajar de manera distribuida, para transformar nuestros entornos de trabajo, para divertirnos en nuestros proyectos, para ganar dinero con honestidad sin tener que renegar del tiempo que empleamos en conseguirlo, necesitamos algo más que la empresa… y también romper con esos rígidos y prácticos moldes conceptuales que nos impiden ver algo más que empresas y derivadas como única manera de entenderse. Nada de transitar a la empresa 2.0. Empezar de nuevo con todas estas posibilidades que la red nos ofrece.
¿Qué será eso? Pues otra manera de organizarse al margen de la norma ¿Al margen de la ley? ¿Por qué no? No malinterpretéis. No estoy haciendo apología de una nueva mafia p2p. Trabajo de consultor y soy autónomo, cumplo con la Agencia Tributaria y con otras sacras instituciones; pero puedo organizarme, con otros, en una figura que no sea asociación ni ONG ni fundación; sin patrimonio ni presupuesto, sin juntas ni gobiernos ni asambleas. Una red distribuida, social y profesional, de conocimiento abierto, colaborativa por proyectos, global y comprometida con todo aquello que facilite esa manera de hacer, sea tecnológico o no; y que no deba nada a nadie, ni al estado ni a la iglesia (toque ácrata irresistible).
No es broma.
Y, aunque no lo parezca, ésta va a ser mi entrada previa a la I Cumbre Mundial de Consultoría Pretendidadmente Artesana; aunque probablemente no sea la última…
Para no dejaros sólo con un iluminado discurso de abuelo consultor ácrata, añado esta genial presentación sobre empresa 2.0 que nos trajo gabinetedeinformática, que parece que, poco a poco, bloguea de nuevo. Ojalá.
Mismo tema y enfoque similar en un post reciente en mi blog: Breaking down the wall
En el blog de Martín Parselis… Ciencias versus humanidades
Me ha encantado el post. Coincido con el enfoque y planteamiento que haces. Creo que vamos a ver cambios radicales en conceptos “de siempre” a lo largo de los próximos años. Pienso que la empresa tradicional ha perdido su razón de ser. Puede que el nombre “empresa” siga existiendo en el futuro, pero su contenido será muy distinto al de ahora.
JM
En el blog de Jose Miguel Bolivar… GTD: ¿Hasta dónde hay que planificar?
Estamos de prácticas, experimentando, interactuando en muchos ámbitos y aplicaciones doscero, como abejas de diferentes colmenas que se cruzan continuamente en vuelo y se preguntan si pueden hacer algo juntas y si la miel es lo que les habían contado.
Mi sensación es que de momento muchos están, estamos, intentando traer los métodos y conceptos de siempre a este nuevo mundo relacional y abierto, y claro, eso no funciona.
Supongo que poco a poco, como carpinteros reticentes y repetitivos, dejaremos de intentar clavar y clavar para comenzar a hacer otras cosas y de otra forma.
En el blog de Yoriento… Nueve obstáculos para el cambio de las personas en las empresas (520)
Qué buen post Maestro artesano y dinamitador del orden establecido. Directo al sustantivo, para qué perder el tiempo con el adjetivo.
Yo también tengo ese pálpito de que otra organización es posible pero aún mantengo muchas dudas. No consigo visualizar como se va a “auto-gestionar” el nuevo sistema para evitar disfunciones, decepciones, corrección de las malas prácticas y “prácticos”,… porque ha de ser un sistema basado en la confianza y no en reglas, … bueno no se tengo un lío que no me aclaro
En el blog de luis.tic616… (des)motivación
Coincido con la esencia de esta entrada y con los comentarios anteriores.
Sin embargo, hay algunas paradojas con forma de puertas blindadas…
Paradoja 1: la identidad oficial de una empresa es su personalidad (jurídica). Sin embargo, la verdadera personalidad de una organización se encuentra en la personalidad de sus miembros, lo que son capaces de hacer.
Paradoja 2: la solvencia técnica de una empresa lo cosechan sus logros como tal. Sin embargo, es posible que un grupo de personas sean mucho más solventes que toda una empresa.
Paradoja 3. Hoy por hoy, una agrupación de personas organizadas, con personalidad propia (pero no con persolidad jurídica), no pueden acceder a trabajos allí donde son más necesario, en las administraciones públicas, porque no tienen lo que hay que tener (constitución empresarial), aún teniendo más de lo que deben tener (conocimientos y experiencias acumuladas).
¿Sigo?
…Confianza del mercado si no estás estructurado, si no posees una marca que juegue con las mismas reglas que el resto de marcas de empresa.
…Dificultad para encontrar una normativa basada en la confianza y no en una relgamentación.
…No sé, paro ya.
Me encantan las ideas que quieren transformarse en realidad en forma de llaves para abrir puertas blindadas
En el blog de Nacho Muñoz… Observatorio de la blogosfera de RRHH
Te respondo a ti, Luis, primero porque planteas pegas importantes. ¿Por qué preocuparse de las disfunciones y las decepciones, de las chapuzas y errores de algo que aún no sabemos imaginar? Ya llegaremos a eso en el camino. Como decía mi querido profesor Tomás Ibáñez, “se trata de pasar de un estado de confusión a un estado de confusión superior”
De acuerdo con vosotros, Yoriento y José Miguel. Es muy difícil romper pautas, a nuestra edad… . Pero en eso estamos.
Gracias, Martín, por la referencia.
Host** Miquel, pero en el camino no te puedes dejar todos los dientes … que hay que comer… perdonad que suene a aguafiestas pero creo que uno antes de lanzarse ha de saberse como controlar la caída aunque no sepas donde se va a estrellar. Seguimos debatiendo
PD. No lo he dicho antes pero la presentación es muy buena
En el blog de luis.tic616… (des)motivación
Nacho, la confianza se establece entre personas, no entre marcas por mucho que se siga dando la vara con la marca personal esa. Yo trabajo, sobre todo, con la administración y nunca he querido optar a grandes proyectos donde las consultoras se despellejan entre sí para conseguir el contrato. Y, desde luego, me contratan por la confianza que les doy, con o sin marca. No se trata de “comerse el mercado”, sino de conseguir una alternativa “superpuesta” a la empresa que eres, soy y seguiremos siendo…
Igual te digo, Luis, no se trata de abandonarlo todo por una nueva idea, sino de superponer esa nueva organización a la vieja y a ver si aguanta. Yo no soy autónomo porque sea la “mejor solución”, lo soy porque estoy obligado. Ya cumplo con eso, ahora a ver si encuentro una fórmula no obligada, sino prometedora y divertida.
¿Empresa o forma red de organización? … ¿se complementan ó se sustituyen? ¿Cuestión de costos de transacción? ¿Cuestión de confianza? ¿Reputación? Marca… bueno, tal vez tengamos que volver a leer aquel famoso paper de Coase (1937) . Los clásicos… siempre los clásicos… allí está todo!!!
Excelente post.
Bienaventurados quienes tienen algo de tiempo para postear por que ellos será el reino de los ciber.
un abrazo
Andres
En el blog de Andres Schuschny… Factor sorpresa
Las organizaciones tenderán a ser más elásticas, intangibles y virtuales, en la medida en que empecemos a enterrar paradigmas sobre su estructura. No falta poco para que llegue el día en que una empresa reconocida sea un hombre o mujer con su portátil bajo el brazo…
SM
En el blog de Senior Manager… Lo que no sabías sobre Consultoras y Empresas y sus diferencias en materia de selección y entrevistas
Me cuesta decir nada más que gracias por el fondo y por la forma. Ay la belleza!
No sé hasta dónde llegaremos pero la travesía promete y el horizonte se adivina esperanzador.
Nos vemos en Segovia Maestro.
En el blog de Odilas… Lila Downs
Me pasa como a Odilas, que me ha encantado desde la forma hasta el fondo. Me resulta “evocador”.
Muchos estáis ya experimentando estas “asociaciones” en red desde hace tiempo. Yo llevo poco y siempre con el contrapunto cotidiano de la empresa. Tengo cierta presión por las cuestiones que Luis.Tic616 plantea pero por no repetirme plantearé algo que creo no haber notado en vuestros comentarios.
Hay un cambio en ciernes, una nueva forma de organizarse, pero hasta ahora sólo veo, leo, conozco casos en que “nos organizamos” para ofrecer algo de una forma nueva a… a una empresa o administración! Quiero decir que lo que no ha cambiado aún es el cliente.
Creo que cuando estas nuevas estructuras organizativas dejen de ofrecer cosas y comiencen además a demandarlas a consumirlas, entonces será cuando el cambio realmente haya comenzado. Mientras diría que aún “experimentamos”.
En el blog de lboisset… El proyecto parece la solución
Certero el dardo, SR, certero . No quiero ser aguafiestas, pero el sistema es mucho sistema. Digo, la capacidad para asimilar (resistence is futile) las propuestas antisistema es acojonante: veanse como anecdota las camisetas Che Guevara, o a otro nivel, en lo que han derivado los movimientos en pro de los derechos de la mujer a nivel institucional, género (!) incluido…
Digo, que las organizaciones van a adoptar a su conveniencia: el lenguage 2.0 (lo vi el otro dia en una charla de doscerolabia de una mandamucho de la ONU) ,algunas herramientas y en los mejores casos, algunos de los principios de la 2.0.
Digo, TODO ELLO con el AFAN de perpetuarse no de transformarse. Perpetuarse los directivos, perpetuarse los tecnicos o perpetuarse la organizacion. Y en parte, esto sucede porque los lectores y artesanos y activistas de la 2.0 ni somos directivos ni gestionamos nuestras propias empresas ni queremos serlo o hacerlo. O sea, que como sugiere la entrada, si de verdad quremos ver empresas -o lo que sea- 2.0, hay que fundarlas, abrirlas o tomarlas por la fuerza, ja, ja, ja. Un poco de humor para terminar.
Salut!
Resumen: nada nada, a
Comparto el entusiasmo de los comentarios anteriores. Me ha encantado. A ver si nos dejan hacer algo que escape a los modelos establecidos, que como dice Surman, el sistema es mucho sistema.
En el blog de Carlos Cesar Alvarez… CNC y SEOPAN elaboran una propuesta al Gobierno
Estoy seguro de que a muchos de los que aquí postean ya les ha pasado antes: dejaron rebaño y siguieron ese otro camino que pocos querían coger. Algunos por curiosidad, otros por aburrimiento, otros por llevar la contra. La verdad me importa poco cuantos seamos, si somos. Esto ya ha empezado y como nos recuerda @odilas en su blog: “Never doubt that a small group of thoughtful, committed citizens can change the world. Indeed, it is the only thing that ever has”
Un amigo y antiguo jefe dejo su cómoda posición de freelance para montar algo más ‘grande’, una empresa. Estoy seguro que en breve será más habitual ver a conductores en sentido contrario.
La legislación, como siempre, fabricará leyes adecuadas 5 años después de que se necesiten
Muy buen post, Miquel. Social web is a “state of mind” pero creo, como comentas, que es tan incompatible con lo que existe (difícil, difícil, encontrar experiencias de éxito) que deberemos esforzarnos, y mucho, por aportar valor “empresarial” a cambio de ese cambio en el mindware (lo más difícil) que pretendemos.
Intentaré encontrar ese momento via Skype para vernos en Segovia.
Un saludo
Andres, prometo leerme la referencia. Coincido contigo en que no hay nada (o poco) nuevo bajo el sol.
Senior, vale, pero hay que ensayar también el salirse del patrón empresa… a ver qué da de sí.
Odilas, gracias y será un travesía divertida si consideramos la compañía.
lboisset, si dejamos un poco de lado la empresa, si la superamos de alguna manera, el cliente deja de ser también cliente como tal ¿no? Esto da para otra entrada…
Surman, poco puedo añadir a lo dicho. Si el sistema es mucho, pues no le despertemos y curremos en él discretamente. No pienso trabajar en contra. Eso es otorgarle aún más fuerza y presencia. Al margen y, al tiempo, en él y ya veremos.
Gracias, Carlos Cesar Álvarez, ya te respondí cuando lo hice a Surman, ¿no?
Vicent, (¿o Santi? ), buena frase has escogido. Pues eso exactamente, aunque no aspiremos a tanto, que c…, con divertirnos…
dreig, de acuerdo contigo. Hay que aportar valor, pero de verdad creo que, tal como les va a las empresas, eso es fácil fácil. Lo difícil será explicarlo. Nos televemos en Segovia, espero.
Coincido con la idea, lo sabes, a partir del núcleo que, para mí lo sustenta y me anima:”poder disfrutar de ese juego hacker de trabajar de manera distribuida, para transformar nuestros entornos de trabajo, para divertirnos en nuestros proyectos, para ganar dinero con honestidad sin tener que renegar del tiempo que empleamos en conseguirlo”
A eso voy a ese primer encuentro en Segovia. Espero que los resultados den para el total de encuentros que haran falta para darle forma. Yo creo que sí…
En el blog de cumClavis… ¿Líderes o liderazgos?
Pues hay un espacio vital que se mueve entre la tradicional empresa con ánimo de lucro y la organización sin ánimo de lucro. Depende lo cerca de uno u otro extremo será una “empresa con propósito” o una “organización con propósito”. Lo iremos explicando. Tiempo hay.
En el blog de Julen Iturbe-Ormaetxe… Athletic de Bilbao, un sentimiento
cumClavis, como dice Julen, ocasiones y tiempo habrá.
Me gusta pensar fuera de la caja, pero no perder el foco, ni dispersar energías. Cito mucho a Sanguesa con su “practicante reflexivo”, porque hay que HACER+PENSAR, para volver a HACER. Así que si pienso, es siempre para hacer…
Igual que hay pensamientos que ayudan a hacer, hay otros que no, que generan más confusión, y lo siento, pero no quiero ir a un “estado de confusión superior”. Todo lo contrario, necesito simplificar con inteligencia para gestionar las múltiples paradojas en las que estoy metido, y hacerme entender.
No soy lo que se puede decir un académico. Soy un consultor que trabaja a pie de calle con empresas, y que además de trabajar, reflexiona. Honestamente, creo que se puede hacer mucho para ayudarlas en la transición sin cambiarles el nombre.
El otro día comentaba a Julen, en su post sobre su charla en EOI, que me preocupaba el posibilismo de las consultoras, y los intentos que percibo en los últimos tiempos de intentar “adaptar” el lenguaje (¡¡y hasta los principios!!) para hacernos entender mejor. L e decía que prefiero andar despacio, pero no descafeinar esta cosa tan bonita.
Pues hoy, al leer esto y gustándome la reflexión, he pensado: Puff… tampoco quiero ir tan despacio, ni perderme en conceptos que no son, para nada, “el pollo del arroz con pollo” del desafío que tenemos por delante. Si lo que hay son “empresas”, vamos a cambiarlas.
¿Por qué la lógica 2.0 es incompatible con el concepto de “empresa”? Llámense como se llamen, lo que estamos buscando son ORGANIZACIONES más abiertas, humanas, participativas y transparentes. Centrémonos en dotarlas de contenidos, y no en la etiqueta.
¿O es que pensamos que el modelo de “trabajo-en-red-entre-individuos-totalmente-autonomos-sin-integración-orgánica-alguna” funciona para cualquier entorno o tipo de trabajo? Nada de eso. Su ámbito de aplicación se reduce al ecosistema de los infoproductos. La mayoría del mundo no produce así. Necesita de vínculos más orgánicos y estructurados porque los procesos son de naturaleza diferente (y menos fragmentada o granulada) a los digitalizados. No caigamos en la mirada estrecha del ombliguismo digital.
Por resumir. Miquel, la palabra “empresa” fracasa NO porque en sí misma no sirva de repositorio de los cambios 2.0 que queremos, sino porque como alguien ha dicho, “estamos de práctica, experimentando”.
¿No hay ejemplos? Por supuesto… ¡¡si es que estamos empezando!! No hagamos las cosas con prisa.. tengamos paciencia… ya veréis ejemplos, y muy alentadores… mientras, a currar compañeros.. a HACER!!!
Mientras tanto, ya yo he pensado en mi “empresa ideal” y voy a por ella…
De acuerdo con lo de organizaciones en su sentido más amplio y genérico, Amalio, pero quizá el concepto de empresa, tal como hoy se ha convertido en un montón de limitaciones, ya no sea el adecuado; de verdad que es una duda que tengo muy presente. Pocas empresas están centradas en generar nada nuevo, nada satisfactorio, nada divertido. Todo son cargas, costes y rendimientos, miradas hacia el interior y cabeza baja, nada de horizontes… Olvida lo 2.0 y eso sigue teniendo mal pronóstico. Pero no abogo por “acabar con ellas”, sino por superarlas mientras seguimos bregando en el único campo de juego del que disponemos: el mercado, claro, es su sentido más amplio.
A ver si los vemos, esos ejemplos, y, mientras tanto, por supuesto, a hacer, claro.
Leo y releo el post. Me ha gustado, como dice Odilas, en todas sus dimensiones. Lo que expones es todo un reto, una aventura, una empresa tal como entendían el término los aventureros de otras épocas. En ese sentido, creo que esto también será una empresa con un propósito compartido.
En el blog de Anna… De la invisibilitat de l’ànima
Pues yo creo que ya casi nos falta levitar
Escribo desde el “lado oscuro de la fuerza”, es decir desde una empresa. Sé que mi lado es contaminado, imperfecto, casi maligno, porque no tiene el brillo de lo artesano. Pero para mi lo fundamental es reflexionar en qué medida somos capaces de influir las realidades empresariales para transformarlas, en un sentido más humano, más sostenible. Y me da igual si eso es 2.0 o el número pi. Porque en el mundo abierto soñado seguirá existiendo empresas, y humanos trabajando en ellas. Y merecerá la pena seguir haciendo algo.
En el blog de Uxio… Discapacidad, tema aplazado
Anna, esta bien que recuerdes el origen de la palabra empresa y su significado. A lo mejor se trata de recuperarla.
Desde luego que, a la luz de los comentarios, la entrada igual me ha salido un poco demasiado épica. Uxio, no trato de marginar a la empresa del debate 2.0 o abierto, pero sin modelos no hay patrones y las empresas que han coseguido incorporar lo 2.0 son excepciones de esas que se disecan y van a museos. El blog, eso tan sencillo, simplemente no se entiende y ya tiene unos años. Merece la pena, sin embargo, seguir intentándolo; pero ¿tu no crees que se están agotando modelos y que pocos saben reaccionar? recursos humanos (oxímoron), relaciones laborales, propiedad intelectual, riesgo… Las empresas están gestionando su supervivencia y no la “empresa”, en el sentido de Anna.
Le respondía a Amalio, olvida lo 2.0, lo artesano, y dime si, aún así, la empresa como conjunto de reglas, como entidad formal, no está en una crisis que nadie sabe como superar.
La propuesta es que nos pongamos a experimentar con otra manera de organización. Pero no ha de sustituir ni enfrentarse a la empresa. Ha de constituir un modelo válido que permita demostrar que es posible una alternativa abierta, abierta a empresas o a personas de empresa, mejor.
Quitémosle épica y vayamos a lo práctico. De acuerdo.
Y si conseguimos levitar, aquí no nos para ni dios! .
Claro que se agotan modelos, no sólo en la empresa. También en otras instituciones sociales, como las educativas o políticas. Pero a veces tenemos que tener algo más de perspectiva temporal: a corto plazo todo resulta algo frustrante y lento; pero a medio plazo hay cambios profundos que cuajan e impactan. No podemos verlo en función del ritmo de adopción de una tecnología, sino de los modelos mentales que hay detrás y eso aún lleva más tiempo.
En el blog de Uxio… Discapacidad, tema aplazado
Miquel:
Muchas gracias por compartir con nosotros este espacio tan estupendo para la dialéctica. Voy a tu pregunta. La empresa está en crisis, es cierto, por muchas razones. Pero no solo la empresa, sino toda la sociedad que la envuelve. La empresa, obviamente, es un reflejo de la sociedad..
Si queremos cambiar la Sociedad, pufff… el curro que nos queda, amigo. Pero vayamos por partes…
Con todos los respetos, lo que a mi me asusta es perdernos en el juego semantico de los conceptos. No entiendo todavia, lo siento, ¿por que la “empresa” no sirve como repositorio 2.0″? ¿no es una organizacion que tiene tambien naturaleza social? ¿no son conjuntos de personas? ¿es porque está hecha para ser rentable y ganar dinero, y el dinero no encaja con lo 2.0? ¿es eso? ¿pero es que hay una única forma de entender la relación de la empresa con el dinero? ¿es que hay una lógica unica que explica la filofosofia de “competir” y de “ser rentable”? Seguro que no… Todo esto se puede matizar, al menos para ciertos tipos de empresas.
Me encantaría que nos centremos en eso: ¿es un problema de dinero, del imperativo empresarial de hacer dinero?
Por cierto, si aceptaramos que no puede haber empresas 2.0, entonces desde mi limitada visión, Miquel, solo nos quedarían dos alternativas:
1) Nos planteamos como meta un mundo 1.5, para conseguir finalmente uno 1.2, y por lo menos, hemos conseguido avanzar algo… no esta mal, prefiero vivir en un mundo 1.2 que en uno 1.0..
2) Echamos abajo el capitalismo, y sus “empresas”, para construir una nueva sociedad no-capitalista que de cabida a las organizaciones 2.0.
La segunda opcion va en la linea de “levitar” de Uxio. He probado otros sistemas, y la verdad, éste es por ahora el “menos malo” que conozco, aunque (muy) francamente mejorable. ¿Y la primera opcion? Bueno, no la descarto, sigo dudando… pero por ahora, prefiero plantearme un objetivo mas ambicioso, y seguir creyendo que es posible la empresa 2.0 (bueno, al final nos quedamos con una 1.7.. pero por lo menos el color es más 2.0 que 1.0).
Sospecho que el problema no está en la “empresa” sino en el modo-de-organizarse e incluso en el tamaño, así como otras variables. El tamaño no es ninguna tontería. Creo recordar que Genis, hace no mucho tiempo, me comentó que “las administraciones publicas se comportan, a los efectos de la web social, bastante parecido a las grandes compañias”. ¿entonces?
Uxio, tu segunda intervencion esta mas matizada que la primera y ya integras en el análisis el factor-tiempo, que me parece vital. La idea de pedir paciencia, que es algo que vengo defendiendo hace tiempo, me parece muy pertinente. Otra cosa es apurar los plazos con un discurso-agradable-para-la-gran-empresa, solo por ser más “realistas”… A mi dejame levitando…jjj… que me lo voy a pasar pipa…
Perdona el rollo… pero has abierto la caja de pandora…
En el blog de Amalio A. Rey… Mi empresa ideal… (post- 74)
Veo que aquí nadie le niega la mayor a nadie, parece todo cuestión de grado. De hecho es sobre esa cuestión de grado sobre lo que estoy insistiendo. Fijaos que la entrada comienza por una pregunta ¿Y si…? Quiero jugar a la respuesta a esa pregunta. Trabajo como consultor y consigo, humildemente, algunos avances entre el 1.0 y el 2.0, pero no nos engañemos, la numeración nos permite grados. Sin esa numeración estaríamos entre el todo y nada y mucho más cerca del nada. Y el problema es que mientras intentamos avanzar en cómo aplicar conceptos abiertos a la empresa, la legislación, las metodologías (iba a decir artimañas) de los RRHH (oxímoron) y las estrategias de los “agentes sociales” no dejan de buscar nuevas maneras de reglamentar y cerrar, sustituyendo personas por procesos e inteligencia por normas. Es lo que se lleva de verdad, no lo 2.0 o lo abierto.
El tamaño importa, ciertamente, desde lo pequeño podemos superponer una organización abierta a la organización formal, pero el modelo de empresa (tradicional, vale) busca el gigantismo como parte del éxito. Y el dinero como imperativo. Eso, lo pongas como lo pongas, es un error. Lo de los fines y los medios. Que algo sea necesario, el dinero, no implica que sea determinante.
Pero opinar así no es desear acabar con el capitalismo. El sistema ha demostrado su capacidad de evolución y de adaptación a sus propios errores. Insisto en que la empresa, como forma jurídica, no como concepto, es un invento como tantos.
La propuesta es juguemos a todo, a ser empresa (lo soy), a ir del uno al dos poco a poco, y al tres; y juguemos, también, a la respuesta afirmativa a la pregunta; empecemos buscando maneras de organizarnos “supra-empresariales”, a ver si encontramos algún modelo a seguir. Con tiempo, sí, pero, oye, tengo mi edad y quiero verlo .
Esta divertido el debate ¡sí señor!.
OK, suscribo todo lo que has dicho:
1) no al gigantismo como prueba de exito (hablo de esto, precisamente en mi post de “mi empresa ideal”)
2) Normas y mas normas… ¡¡un horror!!
3) Nuevas formas de organizacion “supra-empresariales”. Vale = colaborando en red entre muchas “empresas” pequeñas (o personas, cuando sea posible) con culturas compatibles.. = ecosistema 2.0
4) Proceso gradual para ir avanzando hacia la derecha del continuo 1.0-2.0, sin apretar en exceso la maquina, para que no se asusten. Puede ser un camino, pero hay muchas formas de hacerlo. Unas me gustan y otras no…
Por cierto, si hablas de la empresa como “forma juridica”, y no como concepto, entonces mira, Miquel, tengo poco que decir. Que lo cambien cuando quieran….
En el blog de Amalio A. Rey… Mi empresa ideal… (post- 74)
Amalio A. Rey, lástima que estemos de acuerdo , estaba divertido. Ya encontraremos otro debate ¡Venga!
Además de la entrada en sí, me han gustado las precisiones que han ido apareciendo en los comentarios respecto de persona jurídica, empresa, organización, abierta, capitalismo, ánimo de lucro….
Me ha llamado la atención que no hayan salido otras como corporación y cooperativa, que también simbolizan otros tipos de empresas.
Por otra parte, entiendo que algunos comentarios de Luis-tic616 y Amalio ponen de relieve la importancia de la percepción de riesgos en el sistema económico actual que probablemente vais a tratar en Segovia. Os deseo mucho disfrute y muchos frutos.
En el blog de josempelaez… El modelo y la estructura según Méndez
Estimado: Además de compartir le idea, incluso varios han acumulado papeletas para desarrollar “al margen”. Reconozco en Julen el primero en escuchar hablar de open bussines y a David de Ugarte de Democracia Económica.
QUizá la cooperación sea el camino alternativo. Pero no se puede renunciar a ir a un margen y dejar que el mercado siga poniendo las reglas..
Yo hablo de “disonomía” para que las reglas comiencen también a cambiar..
En fin, el punto es que la idea es cada vez más extendida.. hay que salir de la insatisfacción de los mercados..
Saludos!
Gustavo
neocivis.es
En el blog de neocivis… Ayuntamientos, proximidad y blogs