Estoy en un proyecto de definición de procesos. El encargo inicial es, de buen sentido, hacer un análisis del proceso actual, para sugerir mejoras y, más adelante, implantarlas. Se trata de un proceso bajo mucha presión, de mucha importancia e impacto social. El equipo que los gestiona va de bólido para poder sacarlo adelante y me doy cuenta de que, a medida que lo analizo y diagramo, el proceso va cambiando por sí sólo bajo las iniciativas de la gente del equipo. Si sigo así, cuando acabe, mi diagrama no se corresponderá con la realidad.
II
Loretahur habla del efecto mariposa, de como el matemático Edward Lorenz planteó ese efecto, creo que relacionado con las teorías del caos, según el cual el aleteo de una mariposa en un lugar del mundo podía desencadenar un conjunto de reacciones que produjeran cambios atmosféricos violentos en la otra parte del globo. Loretahur piensa que quizá una entrada, en un blog, en el medio blogosférico, es como un aleteo de mariposa que puede cambiar las cosas.
Hoy, M@k entra en una conversación blog2blog con Loretahur respecto a su entrada de la mariposa y publica Mariposas aleteando en la blogosfera, donde duda un poco de la analogía entrada-mariposa, blogosfera-atmósfera. Estoy bastante con él, aunque la posibilidad está ahí y la analogía vale la pena haberla planteado aunque sólo sea por su atractivo. Si non è vero è ben tovato.
III
La gente que participa en ese proceso en el que estoy trabajando, a quienes entrevisto uno tras otro, me dicen que el mero hecho de hablar les hace plantearse las cosas. Les doy un tiempo (escaso) para pensar y para contar. Cuando salen de la reunión en la que me han explicado el proceso, van a cambiarlo en algo. Ya. Es inevitable. Han pensado en él y han visto cosas y se les han ocurrido ideas.
IV
Nadie es profeta en su tierra es un viejo dicho. Creo que nadie es profeta en ningún lugar, que el profeta es una figura arquetípica que desearíamos que fuese realidad, pero no. Las profecias hablan de las personas y las personas cambian sus comportamientos cuando entienden que hablan de sus comportamientos. En cuanto un profeta abre la boca y habla, las condiciones cambian. Si yo le hablo a un montaña (o a una bicicleta) y le digo algo, la montaña (o la bicicleta) no varía en un ápice su destino en función de mis palabras. Si yo digo que la economía va mal y la gente me oye porque soy ministro de economía, la economía empieza a ir mal porqué la gente empieza a comportarse creyendo en mis palabras. No es profecía, es como somos (¿porque los economistas nunca han entendido, no han querido entender o pretenden no entender algo tan simple?).
V
El Principio de la indeterminación de Heisenberg dice, poco más o menos, que no puedes conocer la posición de una partícula y su velocidad al mismo tiempo. Puedes conocer su velocidad o puedes saber su posición, pero no las dos. Aunque erróneamente, este principio de la física cuántica se ha asimilado con otro de las ciencias sociales, el efecto del observador que por el mero hecho de observar, modifica lo que observa. Algo así como lo del profeta.
VI
Planteo a uno de los mandos del equipo de ese proceso en el que trabajo la posibilidad de ir publicando mis diagramas y las aportaciones de la gente en una wiki. Así, todo el equipo podría reflexionar y plantear ideas en colaboración. El proyecto se convertiría en una construcción colectiva de un proceso flexible, que se adaptase a las diferentes iniciativas. Al tiempo, el proceso se formalizaría, ya que debe publicarse.
Me contesta que bajo la presión con la que están trabajando cree que es mejor que la gente siga instrucciones y no entre en críticas e ideas; que cuando el proceso esté asentado habrá tiempo para sugerencias.
VII
¿Tiene todo esto algo que ver? ¿Estoy en un caos sináptico? Continuará ¿Continuará?
Lo suyo es que en esta entrada hubieras concluido prediciendo el éxito del proyecto. De esta manera, por el efecto mariposa, las profecías autocumplidas o el principio de la indeterminación, vaya ustéd a saber, hubiera quizás terminado cumpliéndose.
Quizás que el consultor, como autoridad de mayor sapiencia, clame al mundo blogosférico sus expectativas de éxito, leído por los clientes, les genere una actitud y unos comportamientos proclives a que finalmente se consega ese resultado.
Me gusta la idea de ese comentario en un blog que genera una tormenta en la otra parte del mundo. Suena muy poético y hasta muy 2.0
Hum, sospecho que siguiendo las isobaras de esta conversación no hago más que contradecir aquélla mi posición del post enlazado, pero bueno, sospecho también que mi postura no es la de profeta, sino la de abogado del diablo.
Todo lo que citas en el post, salvo el principio de incertidumbre, me suena a comportamiento de sistema complejo autoadaptativo: el sistema detecta los cambios en las condiciones que le rodean y cambia, o no, pero siempre en consecuencia. Si además la decisión de qué es sistema (¿tu empresa cliente?, ¿tus contactos en la empresa?, ¿tú más una de esas dos opciones?, ¿otra opción?), surge la belleza del aparente caos. Y su complejidad. Y si el caos es determinista, surgirá el orden del éxito del proyecto.
Por ejemplo
Sobre el artículo que me citas: mi única conclusión es que el aparente caos de la blogosfera no empuja a la formación de ningún tipo de fenómeno masivo, global, de forma natural y sin esfuerzo por esos granitos constituyentes que somos. No digo que ese fenónemo masivo y global sea imposible, sino que tenemos que seguir insuflando energía al sistema después del primer aleteo, y hacerlo en las direcciones menos disipativas que conzcamos, las más eficaces. Sospecho que las compañías que viralizan vídeos y campañas saben de eso mucho más de lo que imaginamos.
Saludos.
¡Vaya laberintos!
No sé si un comentario en un blog, Félix, tendrá el efecto del aleteo de la mariposa, pero por probar… El proyecto saldrá bien . En serio, la wiki ya está en marcha y, aunque no tendrá el alcance que pretendía, sí he conseguido introducir el factor de flexibilidad que creo imprescindible. La cosa da para plantearse muchas ideas metodológicas y eso es de lo más divertido.
Y, M@k, pasa que las mariposas no tienen voluntad ni intención de cambiar nada ni aquí ni allá, mientras que el bloguero ése que insufla su energía en un artículo tiene una remota meta de generar algún cambio o, al menos reacción. No es lo mismo pero sigue siendo interesante utilizar la analogía, con toda la intención de que se convierta en verdad; y eso sí es posible si se siguen esas indicaciones que nos propones que ¿se podrían traducir en “tozudez bien enfocada”?
Podríanse ;->