Ayer, en el decálogo (+1) sobre la vagancia como virtud, en el décimo punto se me escapo una sentencia que no es mía: “El más rápido nunca es el más certero”. Me quedé con la duda pero ya recordé de dónde venía. Hay que ser agradecido con las fuentes. Así que os dejo el original. En la película Unforgiven (Sin Perdón) (1992), un excelente anti-western de Clint Eastwood (productor, director y actor), el personaje que interpreta Gene Hackman, Little Bill Daggett, le descubre a un cronista de pistoleros legendarios porqué ser el más rápido no es ser el mejor.
Unforgiven: porqué ser el más rápido no es ser el mejor
Más adelante, William ‘Bill’ Munny, el viejo pistolero acabado que interpreta Eastwood cierra el desenlace con una matanza según la doctrina de Hackman. La podéis ver aquí. No os preocupéis por desvelar el final de la película. Es tan buena que la gracia del desenlace más o menos inesperado es lo de menos. Imprescindible verla. Un clásico de culto.
Urbanita para toda la vida, fugado en una isla mediterránea; filósofo y letrado que mola más que psicólogo, de apellido, social que, en mis tiempos, era una especialidad. Entre tanto título genérico me quedé con un perfil polimórfico y más bien metodológico. Desde la enseñanza a la consultoría, pasando por la estadística, la creación de [...]


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