La verdad es que cuando me enteré, al oír las voces iracundas desde el blog de Alorza , pensé que estaban de coña, que eso no podía ser cierto en nuestra Europa del bienestar a costa de lo que sea.
De la mano de Berlusconi y Sarkozy, Europa se dispone a asestar un duro golpe al derecho social poniendo fin a la jornada laboral máxima de 48 horas semanales aprobada por la Organización Internacional de Trabajadores en el año 1917.
Los ministros de Trabajo de la Unión Europea aprobaron a primera hora de la madrugada de hoy en Luxemburgo la propuesta de la presidencia eslovena que permitirá elevar la semana laboral vigente, de 48 horas, hasta 60 en casos generales y 65 para ciertos colectivos como los médicos.
Pero sí. Uno va descubriendo ( ¡a mi edad!) que ese mundo cuerdo de los adultos era una mentira cochina de nuestros mayores y se vuelve desconfiado. Otro de esos hechos increíbles es el del cierre patronal salvaje y fascistoide al que se han empeñado en llamar huelga desprestigiando otro derecho del trabajador. Pero, ya sé, ése es otro tema…
Los ministros del trabajo se deben haber creído el cargo literalmente y, claro, van y toman medidas para que se trabaje más. Igual si les cambiamos el cargo y les ponemos ministros de los trabajadores acomodan sus peregrinas ideas a lo que deben. Naturalmente me muestro en contra de que esos tipos puedan, de un plumazo, presentar una propuesta así y que sea tenida en cuenta y adoptada por ese limbo burocrático en que se ha convertido Europa.
Pero no quiero apuntarme así, sin más. Es que no estoy seguro yo de si el cabreo generalizado es por el gesto de esos tipos o por las 65 horas que pretenden que se pueda trabajar. Porque, si es por lo segundo, ya os digo que mucha población trabaja esas 65 horas y más. Y no hablo de autónomos o ambiciosos ejecutivillos, no; hablo de trabajadores por cuenta ajena de esos de toda la vida, que se parten el pecho por pagar la hipoteca que no deja de subir. Hablo de, por ejemplo, la primera industria del país: el turismo de sol y playa, donde es práctica aceptada por las dos partes las 6 (o más) jornadas a la semana de mucho más de 8 horas cobradas en negro, que así nos ahorramos unos impuestos.
También me pregunto cuántos currantes que, efectivamente, hacen más de 8 horas porque sino serán mal vistos, no desearían que se hiciese oficial su verdadera jornada.
65 horas ¡Ni de coña! ¿Ni de coña? Pues existe. De hecho, nunca se fue.
- Buenas crónicas del tema en el blog de Odilas, en la entrada de Alorza. César Calderón ha montado un grupo en Facebook que ya andará por las 800 personas. También en Tuenti puedes apuntarte; y aquí tienes un blog donde Joselito, además de escribir una excelente argumentación, te permite enviar un email a todos los eurodiputados sin que te suspendan la cuenta de Gmail.
- En la prensa, por ahora, esta movida bloguera ha tenido eco en Público, El Plural y Diario Crítico.
- Las instrucciones para apuntarte a la protesta son estas:
- Coloca el banner en tu web o blog
- Escribe un post sobre el tema
- Envíalo por email a todos tus amigos
- Hazle saber a los eurodiputados de tu país que NO LES VOTARÁS si aprueban la medida con su voto. Aquí tienes el listado de mails de los eurodiputados
- Traduce la campaña a tu idioma y extiéndela en tu país.
Y un vídeo que pone en contexto el tema:
Animo con la lucha hermano! Todos unidos en la red para acabar con estas injusticias.
No os olvideis tambien del tema de la alianza ETT e INEM, que tambien tiene delito.
Lucha activa: http://WWW.LUCHAOBRERA.org